Solo en tu piel esta la cura para ese frió ensordecedor, esa dolencia de cuerpo y alma; eterna, esa falta de proximidad, el vació que se establece en medio del pecho y el estimado, que recorre la cabeza, la espalda, la mente y el vientre como un espasmo, esa fractura de extremo interior, sabes de antemano que ya he dejado de luchar que ya no me queda nada ni fuerza por intentar recuperar.
Nuestro calor y las promesas, miles de horas directas e indirectas, las noches mas largas, nada que no recuerdes, todo se va sin que lo dejes, ya no hay salvación para mi conversión, de ilusion a recuerdo, de soledad a paz y viceversa, todo dependerá que que tanto la luna este expuesta.
Vivo sin luchar pero se que te amo y que nadie esta para recuperar este hogar, que no debes preocuparte por que ya no existe posibilidad de ocupar tu lugar, ese tiempo esta blindado, ese cielo esta sellado, y este infierno se esta evaporando.
Léeme mi amor, léeme en el cielo y en el mar, en la playa que quedo pendiente por escapar, en todo lo que falto y no pudo llegar en la carrera de obstáculos que estuvimos dispuestos a arrastrar.
lunes, 20 de junio de 2016
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