sanguijuela

Reflejos que se pierden al otro lado del liquido espejo, avanzando de forma despiadada, van las luces del infierno y los ecos del silencio

Los gritos de los muertos, copas de sangre y un banquete de almas ingenuas, el cielo parece despejado, ya ha pasado la tormenta pero aun se percibe en el viento la sensación de tempestad.

Se acerca un gato gris, hace como que no me ve, pero siento que me cuida en cada movimiento, las aves gritan desesperadas y presumiendo sus alas, mismas que las condenan a la voluntad del viento.

Voces que se van perdiendo en el tiempo y plegarias que después de años han sido respondidas, transmutando la esperanza y perdiendo el olvido, la soledad y demaciada compañia ambas sintomas de la perdida de fe desde los primeros días, buscando un dios a quien culpar, persiguiendo la verdad que ni la muerte nos puede dar.

Deseo que estalla y estar tan contento, todo llega rápido y violento, igual vete lo estas haciendo demasiado despacio, deforma las caras de los paisajes conocidos, sujeta los miembros que salen por todos lados, aferrate a la tierra aunque con cada paso, se desmorona el piso.

Y regreso sin romper el ciclo instinto, la curvatura del destino una espiral de cinismo, de nuevo el otro lado esta vacío, de nuevo somos uno, busca con miedo y aterrado un refugio, unos brazos, un motivo, una risa que sea contagiosa y un sol supurante de calor que sobreviva al invierno, que sea capaz de quemar cada copo de culpa y miedo.

Pero lo inútil de la búsqueda merma la memoria y las ansias consumen la fuerza, ya no puedo seguir abriendo mas tumbas ni bebiendo mas sangre los corazones se están atrofiando y ya no saben igual, la sangre puede ser joven o añeja por sorbos es muy dulce o demasiado sincera, otros días resulta llena de adrenalina y amarga por las decepciones que tan frecuentemente nos alimentan.

Mi amor divino infierno, y tu ausencia el purgatorio. Este interminable coas dentro del desgarrador silencio que nos separa, sumergido en la duda agobiado mi reflejo en la farsa de lo que soy, de lo que fuimos y de lo humano que resultamos, mi coraza no me deja pensar ni ver con claridad, es una condena anticipada por lo que haré por las luciones que inflare para después verlas reventar y caer alejándome sin que me deban importar, me veré como tu corriendo sin mas, como ellos de igual forma se han ido y lo seguirán haciendo, separando y cortando los hilos de destino, y los antidepresivos no están ayudando con esto, como curar el enojo y la ira o las cicatrices de mi descontrol, siendo peor aun las cicatrices de lo que nos guardamos y de los hechos que moríamos por cumplir y jamas se llevaron a cabo.


y la verdad no soporto tu recuerdo ni el miedo de perderte y saber que no volverá el tiempo,saber que ni el perdón nos alcanzara para rescatar lo que dijiste que teníamos, y que nada va a curar la ilusion que despertaron tus palabras, este hueco en mi pecho donde no se que poner, esa sensación de que pierdo algo y que me acabo de morir, ese miedo por nunca haber amado así, esa parte de mi organismo que me traiciona en un espiral de cambios y sustancias que me cambian el animo, y abrazar una almohada gritando por un poco de paz, por ese abrazo que apenas logro recordar, ese calor que me dejo atrás, esa duda que me mata y que jamas la quisiste enfrentar.

En noches así siento que aun no es tiempo de verte ir, pero miro por todos lados y ya no estas.

Y ya solo tenia al espejo, ver de frente a la traición, mirándome a los ojos fijamente, tan lleno de reclamos. ¿Por qué abriste esa puerta? 

¿Que te pasa?

No quedo nada de tu cautela ni de lo frió que eras, y lo sabias, sabias en que momento podías perder la cabeza y aun así corriste hacia él, comprendías bien como es la naturaleza humana y por lo tanto lo complicado de la convivencia y lo cruel de nuestros actos tan egoístas, has estado parado en miles de lugares, sabias bien en que dirección caminaba todo, parece que no aprendiste nada de las experiencias, de lo que han pasado tus seres tan cercanos y queridos, aquellos que no se han levantado después de años, esos que nunca recuperaron su vida después de un fracaso como el nuestro, ya tan anunciado, definitivamente necesitabas perder un poco la razón, tu siempre lo dices nadie escarmienta en cabeza ajena, y aun así pensando tanto, repasando cada palabra durante horas te fuiste directo de cara, te estrellaste rompiendo y dejando atrás todo lo que teníamos, sabíamos que debías confiar en tus sueños no es la primera vez que te arrepientes por no confiar en tus instintos ni la primera vez que sufres por confiar y entregar demasiado, y bien claro lo tenias, esta vez era distinto el viento nos advertía del peligro, dicen que lo que no mata te hace indomable, pero esta ocasión salimos desbocados, ya por poco y pierdes el ultimo recurso de freno, ya te hacías directo en el manicomio y solo así te acordaste de mi, de visitarme y preguntar como estaba, de mirarme detalladamente y ver como nos estábamos despedazando, unos días antes solo pasabas y ni te acordabas de saludar, se que todo fue un error al prestarnos atención y solo así recordaste que yo era el único en quien debías confiar y por quien levantarte de la cama, donde no hacías mas que destrozarte, recuperar eso nos costo demasiado tiempo, estábamos solos y ambos deseábamos escapar ni siquiera podíamos dormir juntos, ahora mírame bien, si no te gusto ya sabes que hacer o rompes el reflejo o te levantas y vas corriendo por algo mejor para notros al final siempre estamos solos, búscame en el agua, en un cristal a plena luz del día o en algún pedazo de metal bien pulido, incluso en las pupilas de alguien mas te puedes encontrar conmigo.