Fuiste tu o fue circunstancial, o solo necesario en mi para poderlo sobrellevar y seguir adelante mirando la vida directo a la cara
de ilusion a mentira, haciendo a un lado tu sentir y enfrascarte en la distancia como excusa
de razón a locura, abandonando la luz y encerrarte en la mentira
de singular a plural, dejando de ser único y convertirte en parte de la multitud
de todo a nada, creando abismos sin necesidad, y dejando todo para un mejor rato
de compañía a soledad, destrozando tu imagen y caer en el lecho de lo absurdo
de familia a desconocido, aferrándote a ser distinto, y a fragmentarte hasta no poder reconocerte
de cómplice a juez, rompiendo tus promesas y condenándome por cada error, sin ver lo amplio de nuestros lazos